Antes que nada queremos agradecerles desde el corazón a todos los que han entrado en este espacio, pues es la mejor forma que tenemos de alimentar nuestra visión de futuro en lo que pretendemos desarrollar, y así poder seguir trabajando en lo que nos gusta desde el alma: ser un vehículo de ayuda para que -entre todos- podamos transitar en LUZ, AMOR, ARMONIA y PAZ -y con mucha salud- por el camino de la vida.

     Diariamente aprendemos mucho de las personas que nos acompañan en todos los emprendimientos que hemos llevado adelante.

     Siempre desde el plano de eternos aprendices del TAI JI QUAN, del QI GONG, del YOGA y de la MEDITACIÓN, estamos dispuestos a compartir nuestro saber y nuestro sentir, desde el Alma.

     En el caso de William hace más de 20 años inició este viaje hermoso dictando clases de estas disciplinas, con practicantes de todas las edades, desde niños de 2 a 4 años hasta jóvenes de 90, y de todos los estratos sociales. Yayne por otra parte, lleva 10 años continuos de práctica y capacitación.

    En absolutamente todos los casos, el cambio ha sido visible, cuantificable y contundente: dejaron la dureza -de carácter, de espíritu y de articulaciones- y se fundieron con el agua que son, fluyendo en armonía, siempre de la mano de la alegría, constancia, circularidad y suavidad, al hacer suyas e internalizar estas herramientas milenarias para la salud integral del Ser.

     Creemos en esta trilogía fantástica que forman el Tai Ji Quan, el Qi Gong y el Yoga, porque todas apuntan a lo mismo: armonizar y dejar fluir la energía vital, de manera que al curar el exterior, podamos sanar el interior y reconectar la materia y la energía.

     Somos partícipes de la idea, de que basta con que puedas respirar, para que puedas practicar. Y en los hechos lo hemos comprobado: ninguna patología ha impedido que nuestros alumnos salgan victoriosos de la lucha con el "No puedo".

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Así que BIENVENIDOS, esperamos serles de utilidad,

Yayne González y William de la Pedrueza